Hormigonera Norep elige mayoritariamente los camiones de la marca alemana y confía en la postventa de Pesados Central. Lo explica el arquitecto Alejandro Dorta.
Por Patricia Osuna Gutiérrez
El Grupo Norep nació casi dos décadas atrás, como una constructora, para desarrollar viviendas sociales. Y desde hace ya 15 años, la empresa sumó a la Hormigonera Norep, que para su actividad elige los camiones de Volkswagen. Para conocer más de esta firma ubicada en Villa Celina, La Matanza, la marca alemana le propuso a TruckMagazine.com.ar visitarla en una nueva parada de la acción “En la Ruta del Cliente”. Y en ese marco, dialogamos con el arquitecto Alejandro Dorta, dueño del Grupo Norep, acerca de los camiones y el equipamiento utilizado, los choferes y cómo ser lo más eficientes posible en cada viaje hormigonero.
– ¿Cómo nace la Hormigonera Norep?
– Lo del cemento surgió en paralelo a la constructora. Nosotros hacemos barrios de vivienda popular. La hormigonera nace como una empresa de transporte de áridos y de cemento para consumo propio y para clientes. Hace 17 años compré un Volkswagen “250” y arrancamos el mix con el hormigón. Estuvimos siempre en la construcción, soy arquitecto. Con la constructora hacíamos viviendas, lo que de la mano de la urbanización también requiere calles, y así fuimos armando una ‘hormigonerita’. Este edificio antes no existía y eso verde que está ahí (risas), un obrador, era nuestra oficina. Hoy nos daría lástima tirarlo abajo.
– ¿Por qué el nombre Norep?
– Nace por un pecado de juventud. Es Perón al revés. Cuando era joven, era peronista. Cuando terminé la facultad se me ocurrió el nombre y Oro Gris se me ocurrió por el cemento. Lo empezamos en una época donde conseguir cemento era como encontrar oro. En el país somos 160 hormigoneras y hay de todo. Nosotros somos medianos en tamaño y sólo en el área nuestra hay 52 hormigoneras. Es un negocio de fácil entrada, pero la gente lo subestima. Yo me quiero ir y todos quieren entrar. Nadie entiende que esto es un quilombo…
– ¿El predio siempre fue igual?
– No teníamos nada, esto era un basural y de pronto, nuestra hormigonera se transformó en la primera actividad. Y ahí empecé con los camiones. Los dos primeros fueron alquilados y luego otros más, algo usual en este rubro. Dos años después, ya teníamos varios camiones. Hacemos fletes y somos constructores. Actualmente estamos en un proceso de reconversión: vendimos una parte a Cemento Avellaneda, y ellos van a producir y nosotros a distribuir. También somos una empresa de logística.
– ¿Cómo está compuesta la flota de Norep?
– El primer camión fue un Astra media cabina, modelo 60. Luego compramos dos Volkswagen “220” que nos vendió Pesados Central, el concesionario de nuestra zona. Es un negocio que “te va llevando”. Seguimos con el tema de la logística porque nuestra materia prima viene desde Olavarría, y resulta más caro e importante la materia prima que tu negocio en sí. Porque hay que ir todos los días a buscar la piedra y el cemento a Olavarría. Entonces empezamos a poner bateas, tolvas, y la cercanía con Volkswagen Pesados Central nos ayudó mucho. Tengo una buena relación con Ezequiel, que nos vendió los camiones, y los dueños del concesionario. Hoy la flota es de 23 camiones y más de la mitad son Volkswagen. También hay dos Mercedes-Benz, dos Volvo y un Forcito que está más que amortizado.
– ¿Qué camiones Volkswagen integran la flota?
– Está repartida entre tractores 25.360 6×2 y también 31.280 6×4 hormigonero. Este camión ya viene con toma de fuerza para poder distribuir el hormigón. Podés usar un 6×2, pero le quitas tracción y a veces las obras están cuesta abajo o tienen que subir con barro. En la ciudad podría trabajarse con un 6×2, pero por la diferencia de precio te asegurás que el camión tenga tracción.
– ¿Cómo seguirá evolucionando la flota?
– Queremos saltar a la Escalabilidad para la flota, con camiones 6×2, porque trabajamos directamente con las cementeras a reglamento, y el costo del flete entre el combustible y el chofer es abominable. En cambio, la escalabilidad del semirremolque 2+1 o del 1+1+1 te brinda mucha flexibilidad. Porque el camión viene hasta acá, se va con arena reciclada a otro lado, de ahí hacia Olavarría y cuando vuelve, deja piedra en San Pedro y regresa con arena. Y todo eso podés hacerlo si viajás con 55 toneladas.
– ¿Cómo realizan el mantenimiento de los camiones?
– Mientras están en garantía, con el servicio de postventa de Pesados Central. Además, acá tenemos un taller para lo más básico: mecánica ligera, filtros, frenos y cardan, con un mecánico y dos ayudantes.
– ¿Qué tal es el consumo de los Volkswagen?
– Está en el promedio. No es el mejor, pero tampoco el peor. Volkswagen tiene un consumo medio parecido a Mercedes-Benz. Pero, además, Volkswagen tiene una relación precio/calidad que nos favorece al final de cuentas. Y más allá de algún caso puntual de repuestos, el servicio postventa de la marca es muy bueno.
– ¿Cuántos kilómetros recorren por mes en promedio?
– Los mixes hacen tres o cuatro viajes por chofer, por día, con un promedio de 100 km. Cada viaje son 25 a 30 kilómetros. Y los de ruta hacen 700 kilómetros por día, unos 2.000 por semana y hasta 10.000 kilómetros por mes. Porque es hasta Olavarría y se hacen cinco por semana. En los trompos se calcula por hora y trabajan diez horas por día, porque no se detienen.
– ¿Piensan en un recambio o actualización de unidades?
– Hoy por hoy, tenemos modelos casi nuevos. Pero en este momento necesitamos camiones 8×4 que Volkswagen no tiene. Los necesitamos porque el camión 6×4 lleva 8m3, mientras que el 8×4 tiene más durabilidad, con dos ejes direccionales, gira mejor en la ciudad, lleva 11m3 y reparte la carga en cuatro ejes. Y así, incrementa la productividad.
– ¿Cómo capacitan a los choferes de Norep?
– Buscamos que cada chofer tenga su camión y cuando llega uno nuevo, se le entrega al más experimentado, como premio. Esto es un oficio y no es fácil. Son choferes que llevan un producto que se hace dentro del trompo y tiene que llegar a la obra para colocarle tantos litros de agua. El chofer tiene que saber de hormigón, qué es un asentamiento y mucho más. Les brindamos cursos porque si el chofer no sabe y coloca más agua de la requerida, arruina todo el trabajo. Y se viene abajo el edificio… La resistencia está dada por una relación de cemento y agua; si le ponés más agua tenés que colocar más cemento. Y el cemento lo colocan acá, no en la obra. El daño que pueden hacer es muy grande si no conocen del tema.
– ¿Qué peso trasladan habitualmente?
– Manejan algo que se mueve adentro del trompo, y cada m3 pesa 3.000 kilos. Un camión lleva 24.000 kilos en movimiento del producto final, que se va haciendo mientras van transportando el hormigón. Los movimientos son diferentes al manejar. Los choferes aprendices tardan más de un mes para que los dejemos solos.
– ¿Cuál ha sido la cifra récord de transporte?
– Estamos retomando el trabajo. La pandemia nos destrozó. Estuvimos detenidos más de un año y hoy todavía no llegamos a valores previos. Ya el 2018 y el 2019 habían sido años malos para nuestra actividad. Ahora estamos en 3.500 m3 por mes y el flete anda bien, entre cuatro y cinco viajes por chofer. En 2015 y luego la primera parte del gobierno de Macri, llegamos a transportar 15.000 m3 por mes. Ahí empezamos a comprar camiones porque no alcanzaban. Pero cambió el mercado y hoy nadie hace esos volúmenes.
– Finalmente, ¿cuáles son los proyectos por delante para Norep?
– Retomar varias obras, hacer una nueva gráfica para la empresa y abandonar la obra pública. Me cansé de que me maltraten. La política tiene que entender que nosotros somos patriotas, tenemos 70 empleados, el que no entiende eso… Soy un empresario, un resiliente de este país. No tenemos una gran flota ni nos sobran camiones.