Crece la demanda de vehículos en la franja de ingresos más altos. En lo que va del año, Mercedes-Benz, Audi y BMW tuvieron un salto en las ventas de 13%, 23% y 60%, respectivamente. El tipo de cambio, la inflación y una mayor oferta de productos, entre las causas.
El Clase C es uno de los modelos más vendidos por Mercedes-Benz en Argentina.
Las ventas de autos de alta gama vienen creciendo en forma sostenida en los últimos meses en la Argentina, y en algunos casos, muy por encima del promedio de crecimiento del mercado “generalista”, con tasas que representan el triple en el acumulado del año. Hay que recordar que las ventas totales registraron una suba de 25% en abril pasado en comparación con el mismo mes de 2009, y de 18% en la comparación del acumulado de los cuatro primeros meses.
Si se recorta el análisis a las marcas más exclusivas o de alta gama, los incrementos son marcadamente superiores: en la comparación de los volúmenes de abril de 2010 contra el mismo mes de 2009, existen casos como el de Volvo, que aumentó 153% sus ventas. Claro que el volumen neto de esta marca no es tan significativo (97 unidades vendidas en lo que va del año) y la comparación entre el acumulado de los cuatro primeros meses es inferior, pero sirve para ilustrar el movimiento que tiene este segmento, orientado al nivel socioeconómico ABC1.
Los casos más representativos quizá sean los de las marcas alemanas Mercedes-Benz, Audi y BMW. En ese orden, se ubicaron entre las marcas de autos y comerciales livianos más patentadas en abril: con 511 unidades la primera, 391 la segunda y 241 la tercera.
En lo que va del año, Mercedes-Benz lleva la delantera en cuanto a unidades vendidas, con 2.297 unidades, que representa una suba de 13,6% comparado a las 2.022 del mismo período de 2009. Le sigue Audi, con 1.558 autos vendidos (23,06% más que los 1.266 de 2009) y BMW, que tuvo el mayor crecimiento en el acumulado del año, con 1.395 unidades, frente a las 872 del mismo período de 2009, es decir un 60% de suba.
El BMW X6 M, variante aún más potente del exitoso X6, acaba de lanzarse en Argentina.
Según un artículo publicado en el portal de negocios iProfesional, el mes de marzo “significó el punto de despegue para las unidades de lujo”. Agrega que la importación de este tipo de vehículos desde Europa se multiplicó por cinco, superando ampliamente los embarques provenientes de Brasil, el principal socio del Mercosur. Osvaldo Cado, economista de Prefinex, destacó que “el 10% de la población más rica está en una situación excelente y, en parte, son los que favorecen que las importaciones de bienes suntuarios, entre ellos los autos, muestren enormes tasas de crecimiento”,.
Marcos Ferrario, experto del mercado automotor de Abeceb.com, también citado en el artículo de iProfesional, explicó que “las ventas del sector premium cayeron en 2009 con la crisis, porque una parte de los consumidores pospusieron consumo y las empresas se limitaron a liquidar stocks e importaron muy poco”. En cambio, este año “para las marcas premium, que son casi exclusivamente europeas, las perspectivas son excelentes. Esto implicará muchas más importaciones y más ventas”.
El Audi A5 Sportback saldrá a la venta en Argentina en el segundo semestre de 2010.
El optimismo ya permitió a las empresas modificar sus previsiones para este año. Desde BMW reconocieron que “los primeros tres meses del año superaron completamente las expectativas“, según la nota de iProfesional. “En un principio apuntábamos a alcanzar las 3.000 unidades, pero cada vez somos más optimistas y ahora esperamos estar un 10% por encima de esa cifra”, señalaron.
En tanto, Gustavo Gioia, gerente de Marketing de Audi, consideró que la recuperación del mercado de alta gama es “espectacular”. “El salto que está teniendo el segmento es importante. Así como en 2009 la caída del mercado Premium había sido superior a la general, para este año estamos esperando un incremento muy superior al que tendrá toda la industria”, señaló.
Entre las causas del boom del segmento Premium, Gioia mencionó la estabilidad del dólar, que -indicó- “benefició a todas las marcas Premium, porque se acortó la brecha y los precios se volvieron más atractivos”. “Hoy los clientes pueden acceder a vehículos de alta gama desde los u$s30.000. El abanico de alternativas es muy amplio y las (marcas) Premium han hecho un trabajo interesante para poder lanzar productos top con precios lógicos”, concluyó.