Ambas marcas ya comparten desarrollos en otros segmentos y podría ocurrir lo mismo con las mid-size pickups. “Siempre hay una posibilidad”, dicen en Subaru.
Subaru estaría analizando desarrollar y comercializar una pickup mediana basada en la Toyota Hilux, una de las mid-size más exitosas a nivel internacional. Sería la primera vez que la marca japonesa se mete en esta categoría, siempre muy atrayente para los consumidores de distintos mercados, como el argentino.
La posibilidad sobre el lanzamiento de una nueva pickup mediana con la plataforma de la Hilux se abre a partir de la relación que tienen entre sí: Toyota tiene la mayoría de las acciones de Subaru y ya están desarrollando juntas las nuevas generaciones de los deportivos GT86 y BRZ, además de un nuevo modelo 100 por ciento eléctrico para el mercado de Europa.
Consultado sobre esta chance por el medio australiano CarsGuide, el gerente general de Subaru en ese país, Blair Read, dijo: “Siempre hay una posibilidad”. No dio más detalles, pero reconoció que “siempre hay una retroalimentación” entre ambas marcas y que “muchos usuarios todavía siguen hablando de la Brat”, una pickup compacta de dos puertas que se fabricó en Japón, Sudáfrica y Nueva Zelanda.
Read confesó además que a cualquier automotriz le gustaría tener la gama más completa posible, pero no confirmó de ninguna manera que la pickup sea un desarrollo concreto. Hoy, las ventas de Subaru en Australia están protagonizadas por los modelos Impreza, Liberty, BRZ, WRX, WRX STI, XV, Forester y All New Outback. En la gama no cuenta con vehículos utilitarios.
La pickup de Subaru está “verde”, pero ya aparecieron en la web una serie de proyecciones que imaginan cómo podría llegar a ser su diseño en fase de producción. Algunos creen que será una Hilux con el logo cambiado, aunque para otros tendrá personalidad propia más allá de tomar prestados numerosos elementos.
En este escenario de incógnita sobre el futuro de este posible modelo, es difícil proyectarlo en el mercado argentino. Lo único seguro es que, de producirse en Asia y venderse en la Argentina, estará afectado por un impuesto del 35 por ciento extrazona y su precio se ubicará posiblemente por encima de los competidores.
Lo explicado en el párrafo anterior es lo que ocurre con la Mitsubishi L200 (ver aquí), una pickup de muy buenas características que, entre los problemas de importación y el precio afectado por el arancel extrazona, no llega a afianzarse entre los modelos más vendidos del segmento mediano.
Además, esta categoría en la Argentina tiene modelos muy afianzados, con una larga histórica y miles de usuarios “ganados”, que difícilmente cambien de marca. Competir en el país contra Toyota Hilux, Ford Ranger, Volkswagen Amarok y Chevrolet S10, entre otras, no es una tarea sencilla. Ya la emprendió Nissan con la Frontier, Renault con la Alaskan y próximamente lo hará Peugeot con la Landtrek (ver aquí). ¿Podría Subaru ganarse un lugar aquí?