Massa se lesionó en un espectacular accidente durante la clasificación del GP de Hungría, el 25 de julio en Budapest. El brasileño, que sufrió fractura de cráneo y milagrosamente no perdió su ojo izquierdo (lo impactó un resorte que se soltó de otro auto), estará inactivo por tiempo indefinido, por lo que Schumacher, retirado desde hace casi tres años, iba a sustituirlo y estaba muy motivado por su vuelta a la competición. Pero por desgracia para Ferrari y los muchos seguidores que esperaban ese regreso, el alemán se vio obligado a renunciar debido a unos persistentes dolores en la nuca, secuelas de una caída que sufrió cuando probaba una moto en un circuito español a comienzos de año.
“Ayer por la noche informé al presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, y al director del equipo, Stefano Domenicali, de que no podría reemplazar a Felipe”, indicó Schumacher en un comunicado en su página web. “Lo he intentado absolutamente todo para que fuera posible mi regreso, pero muy a mi pesar, no ha funcionado. No hemos logrado controlar los dolores que aparecieron en la nuca tras la jornada privada de ensayos en Mugello, aunque hemos intentado todo lo posible a nivel médico y terapéutico”, explicó.
El 31 de julio, Schumacher, ahora asesor técnico de la “Scuderia”, hizo pruebas en una Ferrari modelo 2007 en el circuito de Mugello, al norte de Italia, de cara a su esperado regreso. El anunciado retorno de Michael, que corrió su última carrera el 22 de octubre de 2006 en Brasil, había sido muy bien recibido por la prensa y el público, tanto en Alemania como en el resto del mundo. “Schumi” se estaba dedicando “al ciento por ciento a su regreso” y estaba “completamente inmerso en los preparativos para la cita de Valencia”, declaró la semana pasada su portavoz.
La renuncia de Schumacher alegrará al menos a una persona. Se trata de Badoer, hombre reserva de Ferrari que lleva diez años en la sombra como probador y que dispondrá así de una última ocasión para volver a ser piloto de carreras. El italiano, de 38 años, disputó 49 Grandes Premios de Fórmula 1 con pequeñas escuderías, entre ellas Minardi, pero su última carrera se remonta a 1999. Nunca cosechó ningún punto en F.1 y ostenta el triste récord del mayor número de competencias disputadas sin puntuar. De hecho, tras el accidente en el que “Schumi” se rompió una pierna en Silverstone ‘99, Ferrari prefirió llamar a un piloto externo, el finlandés Mika Salo, en lugar de confiar el volante del alemán a Badoer, tester del “Cavallino” desde 1998.
