Evaluamos la nueva generación de la Transit, que ahora es “globalizada” y se convierte en un producto tecnológicamente imbatible. Llega desde Turquía a precios accesibles.
Por Federico Di Renzo
federico.direnzo@truckmagazine.com.ar
Ford continúa ofreciendo vehículos de elevado nivel tecnológico y modernos diseños en Argentina. Y la Nueva Transit, séptima generación del comercial del óvalo, es otro claro ejemplo de ello. A tono con la tendencia que la compañía le imprime a sus productos globales, la flamante Transit va incluso más allá de lo que el segmento de furgones grandes exige.
Además de contar con una línea más musculosa y de fuerte impacto visual, la nueva Transit presenta un renovado interior y ofrece al usuario importantes novedades en materia de seguridad activa, equipamiento de confort, capacidades de carga y opciones motrices.
Se trata de un producto desarrollado desde una plataforma global, bajo la estrategia “One Ford”, que en este caso llega a nuestro mercado desde Turquía. En los últimos días, TruckMagazine.com.ar probó la variante Furgón 350L con techo alto de la Nueva Transit y a continuación te contamos todo acerca de uno de los productos que representa el nuevo estilo de herramienta de trabajo…
ESTILO “KINETIC”
No es extraño que las Ranger, EcoSport y Transit fraternicen si de su frontal se habla, ya que los planteamientos de diseño impuestos por Ford a nivel global se centran principalmente en ese sector. Es la razón por la cual la nueva generación de Transit se benefició claramente en sus líneas, derivadas del lenguaje Kinetic Design, muy vanguardista para este tipo de vehículo.
Adentro se buscó un aire aún más osado y distinto. Toda la plancha también fue desarrollada bajo este formato y hereda gran cantidad de componentes de los Focus y Kuga, como el volante, selector de cambios, instrumental y equipo multimedia.
Puertas adentro la buena calidad de los materiales se percibe a simple vista. Si bien son rígidos, no presentan ruidos ni detalles de terminaciones. Además, la Transit propone actualmente el mayor equipamiento de confort y la mejor habitabilidad de la categoría. Buena nota para la gran cantidad de portaobjetos y recovecos, que incluso se denotan en las butacas para acompañantes: el respaldo de una de ellas hace las veces de mini-escritorio, mientras que la otra guarda debajo de su cojín el kit de seguridad y 93 litros plus para ocupar a gusto.
LA MEJOR HERENCIA
La incorporación de un conjunto de soluciones tecnológicas para facilitar la conducción del usuario parece ser moneda corriente en la Transit. Además del sistema de doble circuito eléctrico compuesto por dos baterías independientes y una nueva gestión de energía que detiene el alternador cuando el nivel de carga se encuentra por encima del 80%, mantiene la lista de componentes de seguridad más amplia del segmento.
En términos de seguridad activa, el conductor se beneficia de los controles de tracción (TCS) y estabilidad (ESP), asistencia al arranque en pendiente (HLA), antibloqueo de frenos (ABS) con distribución electrónica de frenado (EBD) y asistencia al frenado de emergencia (EBA).
A esto se suma un sistema de mitigación de riesgo de vuelco (RSC), control de carga adaptativo (LAC), control de balanceo de tráiler (TSM) y control de torque en curvas (TVC), que actúa a través de los frenos y la distribución de torque en las ruedas delanteras. Naturalmente, mantiene los airbags frontales para el conductor y acompañante de serie en sus cuatro versiones: 350M, 350L, Minibus 460E y Chasis 470E.
La Transit incluye elementos de confort como cierre automático en rodaje de puertas (con llave tipo navaja), que comanda la apertura y cierre individual de puertas en zona de carga. Además, se lucen el sistema Sync de control por voz, un completo equipo multimedia con pantalla de 4” y control de audio al volante, espejos calefaccionables y rebatibles eléctricamente, y ordenador multifunción, entre otros. Así, la Transit es la envidia de muchos automóviles.
Dentro del apartado funcionalidad, también se buscó confort tanto en su conducción como en el uso de todas sus capacidades. Un claro ejemplo es la apertura a 270° del portón trasero con topes magnéticos para facilitar la carga, mayores cotas internas y puerta lateral más amplia, que permite cargar sin inconvenientes un pallet estándar.
Al margen de la caja redimensionada, sólo se puede juzgar la capacidad de carga, con apenas 1.359 kg, siendo que sus rivales superan los 1.500 kg. Sin embargo, en esta versión 350 L (larga) la capacidad volumétrica alcanza los 12,4 m3, una medida acorde a lo que demanda el usuario promedio.
AL VOLANTE
Sentado en la butaca, pequeña y fina comparada con el resto de los utilitarios, resulta cómoda y posee regulaciones en altura, un apoyabrazos de buen tamaño y la bienvenida ruedita para ajustar la dureza del cojín, ideal para largos viajes. Lo mismo ocurre con la columna de dirección, que cuenta con la mayor amplitud de regulación tanto en altura como en profundidad.
El volante, que también pertenece al concepto “kinético”, cuenta con los comandos del equipo de audio, el ordenador de abordo y el control por voz, una exclusividad de Transit. A pesar de su pequeño tamaño (el más chico de la categoría), cuenta con un buen grip, y la dirección hidráulica, de correcta asistencia, ayuda en periplos estrechos.
En general, los comandos son de generoso tamaño y pese a que el equipo de audio mantiene teclas grandes, no ocurre lo mismo con los controles de climatización, que están bastante alejados. Todo lo contrario sucede con la posición de la palanca de cambios. Muy a mano, ofrece un vástago pequeño que logra cambios de marchas precisos y cortos, aunque algo ruidosos en el pasaje.
La disposición del esquema de suspensión es uno de los puntos más fuertes del nuevo modelo. Va firme a altas velocidades, mientras que en ciudad no hace falta esquivar grietas, pozos y cunetas. Sin ruidos a rodamiento ni saltos inesperados, es uno de los esquemas más equilibrados del segmento.
Buena nota también para la visión en general gracias a un gran parabrisas. Los espejos, de generoso tamaño, cubren todo el rango de visión hacia atrás y cuentan, además, con regulación eléctrica y dos ítems que todo utilitario debería incorporar: sistema de calefacción y plegado eléctrico para facilitar la entrada en garajes angostos.
Mecánicamente propone el motor Puma 2.2 de 125 caballos visto por primera vez en la pickup Ranger, aunque para Transit se retocó la inyección y se adoptó el sistema de recirculación de gases de escape (EGR) para cumplir con la norma antipolución Euro 4. Además, vale mencionar la buena insonorización del habitáculo: ni las vibraciones ni el sonido del motor se alcanzan a percibir.
En frío, se ralentiza el encendido, debido a que el motor gira más de la cuenta antes de ponerse en marcha. Nada grave. El Puma es un ejemplo de progresividad, tanto que la reacción por debajo de las 2.000 rpm es algo perezosa. Esto beneficia considerablemente los consumos, con un promedio de 8,5 l/100 km en ciudad y poco más de 5 litros circulando a 100 km/h, a apenas 1.650 rpm en sexta marcha.
Teniendo en cuenta su equipamiento, tecnología, seguridad activa y pasiva, y lugar de procedencia, los $ 456.400 (valor vigente a diciembre 2014) de esta versión 350L resultan razonables y se ubican, incluso, por debajo del precio de la Sprinter de Mercedes-Benz, de producción nacional y líder del segmento. En definitiva, la Nueva Ford Transit es otro producto que se suma a la tendencia vanguardista en un segmento que, poco a poco, se acostumbra a apuntar cada vez más arriba.