Sometimos a examen al monovolumen compacto de la marca japonesa. Al volante de la versión “full”, los puntos destacables y mejorables a cambio de $240.000.
Sin ser inestable, exigido en curvas cerradas el Note evidencia ciertas inclinaciones.
Por Martín Egozcue
martin.egozcue@carsmagazine.com.ar
Si buscabas una prueba a fondo del Nissan Note en Argentina, llegaste al lugar indicado.
En primer lugar te proponemos ver un video introductorio sobre el monovolumen compacto de la marca japonesa. Allí te contaremos cuáles son los aspectos más importantes que tenés que conocer del producto.
Tené en cuenta que la variante que evaluamos en CarsMagazine.com.ar fue la Exclusive, cuyo precio de lista a junio de 2015 era de $240.000. Esta versión es la más equipada de la gama y está asociada a una transmisión automática de variación continua (CVT). La oferta del Note arranca con la variante Sense ($200.750) y continua con la Advance ($210.260), ambas con caja manual de cinco marchas. En todos los casos, el motor es naftero de 1.6 litros y 110 caballos.
Como siempre, luego del video introductorio analizaremos al producto a fondo para identificar sus puntos destacables y mejorables. Además, te ofreceremos el cuadro de prestaciones y consumos medidos por CarsMagazine.com.ar.
En consecuencia, a continuación encontrarás todo lo que tenés que saber del Nissan Note en Argentina…
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=EZM2bkTKTUc[/youtube]
Para destacar
- Diseño original
- Habitabilidad posterior
- Motorización y elasticidad
- Consumo en “crucero”
- Insonorización en ruta
- Confort de marcha
Para mejorar
- Baúl pequeño
- Auxilio temporal
- Faltantes de seguridad
- Desempeño dinámico
- Autonomía urbana
De 0 a 100 km/h en 10,9 segundos y poco más de 43 metros para el “100 a 0”.
PRESTACIONES (*)
Velocidad máxima: 174 km/h (en Dª a 6.300 rpm).
Aceleración 0-100 km/h: 10,9 segundos.
Frenada 100-0 km/h: 43,2 metros.
Recuperación 80-120 km/h en Dª: 8,2 segundos.
Error de velocímetro: a 100 km/h, la velocidad real es 93 km/h (7%).
(*) Mediciones de CarsMagazine.com.ar con instrumental GtechPro.
(*) Presión de neumáticos: 34 libras, según manual del vehículo.
CONSUMOS (*)
Ciclo urbano: 9,3 litros cada 100 km. Autonomía: 440 km.
A 100 km/h: 5,4 litros/100 km. Régimen: Dª a 1.900 rpm. Autonomía: 759 km.
A 130 km/h: 8,7 litros/100 km. Régimen: Dª a 3.000 rpm. Autonomía: 471 km.
Combustible: 91 RON (equivalente a Grado 2), según indicación del fabricante.
Tanque: 41 litros.
(*) Mediciones a velocidades reales con instrumental GtechPro.
(*) Presión de neumáticos: 34 libras, según manual del vehículo.
Sector posterior tan original como el frontal. Un diseño distinto en la familia Nissan.
POR FUERA
Fabricado sobre la misma plataforma del March y del Versa, otros dos modelos compactos de Nissan, el Note se diferencia de aquellos por un diseño más original y, a nuestro juicio, más atractivo. La marca japonesa lo describe como un producto de perfil “juvenil y a la vez familiar”, que desde marzo pasado arriba al mercado argentino proveniente de México (se fabrica en la planta de Aguascalientes) para competir, en primera instancia, contra el Honda Fit.
Con apenas 4,14 metros de largo, el Note resulta bien compacto, pese a lo cual exhibe una amplia distancia entre ejes de 2,60 metros (la misma del Versa, un sedán de 4,49 metros). Esto se debe a que el Note presenta voladizos bien cortos (la parte de la carrocería que se extiende desde un eje hasta el extremo más próximo). A su vez, en ancho acusa 1,69 m y en alto, 1,54 metros. Con estas dimensiones y silueta de monovolumen, el Note también ostenta un bajo coeficiente aerodinámico (Cx), de apenas 0,29.
Mide 4,14 m de largo, con amplia distancia entre ejes de 2,60 m y voladizos bien cortos.
De frente, el Note presenta un diseño distinto al de otros modelos de Nissan. La trompa transmite cierta simpatía, con una parrilla que invade las ópticas y dibuja una sonrisa, y donde el logo de Nissan aparece bien protagónico en el centro. En la parte baja del sector se ubican los faros antiniebla, que funcionan también como luces diurnas (DRL, por “day running light”); es decir, que se encienden cuando están apagadas las luces de posición. Tal vez en esta versión Exclusive, un aro cromado como contorno realzaría más la presencia de los antiniebla.
En el lateral se destaca, como ya apuntamos, una silueta de voladizos cortos, con una leve curvatura de techo que termina en un remate simple, sin agregado del clásico spoiler. También sobresalen las llantas de aleación de 16 pulgadas en diseño de ocho rayos; las ópticas, tanto delanteras como traseras, invadiendo el lateral; y un pliegue cóncavo en ambas puertas que hace más interesante la visual. Por último, la línea de cintura ascendente tiene su remate en una cuarta ventanilla, triangular, dentro del grueso tercer parante.
La trompa transmite simpatía. Llantas de 16 pulgadas específicas del nivel Exclusive.
Desde atrás, el Note también resulta atractivo y distinto a lo convencional. Aquí sobresalen el formato de las ópticas, verticales y tipo boomerang; un voluminoso paragolpes (donde podría haberse ubicado la ausente luz antiniebla) y la inscripción alusiva al modelo en el extremo izquierdo.
La gama de colores del Note en Argentina incluye siete alternativas: Plata, Gris, Rojo, Blanco, Negro, Azul Eléctrico y Verde Azulado. Esto último corresponde al de la unidad evaluada, es de los más interesantes de la paleta y sin duda contribuye a realzar la imagen del vehículo.
El Note que nos cedió Nissan Argentina para esta prueba estaba calzado sobre neumáticos Continental ContiProContact en medida 195/55 R16. El auxilio es temporal, de esos que parecen de motocicleta (medida 125/70 R15) y está ubicado debajo del chasis, en una posición de incómodo acceso. Además, la “jaula” donde está contenido no permite colocar allí una rueda “titular”. Así, en caso de recambio, habrá que ubicar la pinchada en el baúl y si éste estuviera cargado a tope, no quedará otra alternativa que llevarla en el interior del vehículo, lo cual no es recomendable por cuestiones de seguridad.
Original diseño de ópticas traseras. También se destaca la ventanilla del tercer parante.
POR DENTRO
A nivel materiales, el Note está en sintonía con lo que ofrece el segmento compacto (plásticos rígidos), aunque por su origen mexicano se lo percibe mejor ensamblado que algunos de sus rivales “Made in Mercosur”. La presentación es sobria, aunque a la vez prolija. La plancha de abordo, de tonalidad oscura, apenas se toma un “respiro” con un par de apliques en tono gris en la consola central y las salidas de aire laterales. Las contrapuertas sólo muestran un matiz con un paño textil combinado con los tapizados, además de incluir manijas cromadas. Así, podríamos decir que el Note es discreto puertas adentro frente a lo que sugiere desde afuera.
El instrumental es completo, con dos indicadores analógicos para velocímetro y cuentavueltas, y otros tantos digitales para nivel de combustible y temperatura de agua del motor. Estos últimos tienen mejor escala que los analógicos, aunque en conjunto la lectura resulta sencilla. En el display central también se visualiza la información de la computadora de abordo, simple y acotada a consumo instantáneo y promedio, autonomía y odómetro parcial. La operación se realiza desde un botón en el tablero, lo que obliga a quitar una mano del volante.
Interior de sobria pero prolija presentación. Materiales rígidos, aunque bien ajustados.
La posición de manejo no es mala pero podría ser mejor. La butaca nos pareció “esponjosa” (el cuerpo se hunde en demasía) y la sujeción lateral, algo escasa. El cojín se regula en altura y se dispone de un práctico apoyabrazos, ideal para un viaje largo en ruta (allí seguramente se extrañará una regulación lumbar, aunque es poco habitual en este segmento). La columna de dirección se regula en altura pero no en profundidad. El volante, revestido en cuero, incluye los comandos del control crucero, el audio y la telefonía vía Bluetooth. Los portaobjetos no abundan en el Note, que sin embargo presenta una doble guantera (la superior pequeña y la inferior mucho más grande y profunda, aunque sin opción de refrigeración).
La visibilidad no es precisamente un aspecto para destacar. En 3/4 hacia adelante, la marcada inclinación del primer pilar complica un tanto el campo visual. Hacia atrás, a través de la luneta, los apoyacabeza tapan parte del encuadre y no pueden ocultarse cuando no se utilizan (además, son bastante grandes). Al menos los espejos exteriores tienen el tamaño correcto, y la superficie vidriada lateral es amplia gracias a las pequeñas ventanillas (delantera y trasera) como complementos.
Navegador satelital en pantalla táctil de 5,8”. Allí también funciona la cámara de retroceso.
Una de las grandes sorpresas que entrega el Note puertas adentro es la habitabilidad trasera. Realmente el espacio para las piernas es enorme, incluso si los pasajeros delanteros son altos y ubican retrasadas sus butacas. Aquí, como ya apuntamos, influye la amplia distancia entre ejes. El espacio es también generoso en altura, y el acceso se facilita por la amplia apertura de las puertas traseras, en hasta 85 grados. La quinta plaza, como ocurre en casi todos los vehículos del segmento, es más limitada. Si bien es aceptable el espacio para las piernas (el falso túnel de transmisión es relativamente bajo), el respaldo es rígido (es en realidad es un apoyabrazos con posavasos oculto) y falta lugar a lo ancho.
Si bien Nissan describe al Note como una opción de vehículo familiar, la afirmación no tiene sustento cuando se abre el portón y se descubre un pequeño baúl de apenas 272 litros, no apto para una familia tipo en tren de vacaciones. De ser necesario, el volumen puede ampliarse rebatiendo los asientos en proporción 60/40 (en Nissan aseguran que de esa forma “casi se duplica” el espacio, pero no informan una cifra). Además, el baúl presenta un doble fondo, útil para separar objetos delicados o valiosos y que no queden expuestos a primera vista. La boca de carga es amplia y baja, y el espacio en general es de prolija terminación, con ambos fondos alfombrados y un práctico hueco inferior donde se guardan las herramientas (crique, llave de cruz, etc.).
La prueba del Note la realizamos justo después de haber probado la Nueva Suran (ver aquí) y el Nuevo Fox (ver aquí), y en consecuencia nos preguntamos por qué el monovolumen de Nissan no ofrece un sistema de desplazamiento longitudinal de los asientos traseros (como en los modelos de VW), que permita sacrificar algo de espacio para las piernas de los pasajeros posteriores en pos de incrementar el espacio de carga en el baúl. Sin duda, sería una solución que mejoraría la modularidad del Note.
A la caja CVT le faltaría un modo secuencial con marchas simuladas (por ejemplo, con levas).
AL VOLANTE
Como sostuvimos en las pruebas de March (ver aquí) y Versa (ver aquí), el motor es una de las razones por las cuales comprarse un Note. Se trata del impulsor naftero de 1.6 litros, 4 cilindros y 16 válvulas, codificado como HR16DE, que presenta incluso una mejora específica en este modelo. Con doble inyección secuencial multipunto (en March y Versa es simple), y sincronización variable de válvulas continua en admisión y escape, la potencia se incrementó en 3 CV, hasta 110 caballos, con mejor eficiencia de combustible.
De este modo, estamos ante un motor con promesa de larga vida útil (distribución por cadena), que entrega su potencia máxima a 6.000 rpm, con un torque (momento de mayor empuje) de 145 Nm a 4.400 rpm. En sociedad con una caja automática de variación continua (es decir, de una única relación “eterna”), este motor impulsa al Note de “0 a 100” en 10,9 segundos, y hasta una velocidad máxima de casi 175 km/h. A la hora de frenar, la prueba de “100 a 0” nos demandó poco más de 43 metros, una distancia ciertamente mejorable (los frenos traseros son a tambor).
Volante revestido en cuero con comandos de control crucero, audio y telefonía.
La caja CVT del Note, denominada XTronic, es de nueva generación, más liviana y compacta que la anterior, y fue desarrollada por Nissan especialmente para sus motores más pequeños. Más allá del modo “Directa”, también presenta una opción “Low”, que fija el régimen en torno a 3.000 rpm (ideal para subir o bajar un camino de montaña). Además, dispone de un botón denominado “Overdrive”, que como su nombre lo indica, sirve para facilitar un sobrepaso. Al presionarlo, se eleva el régimen de giro del motor (en promedio unas 2.000 rpm) y eso genera mayor reacción. En números, la recuperación de 80 a 120 km/h demanda 8 segundos, un valor por cierto destacable. Pero aquí hay que señalar que, al menos en el Note, esta caja CVT genera una elevada rumorosidad del motor en momentos de plena exigencia, lo cual desde luego no resulta confortable.
En contrapartida, la caja CVT genera un relajado andar a velocidad crucero y también, un consumo razonable. Viajando a 100 km/h, se conforma con apenas 5,4 litros/100 km (el motor gira a 1.900 rpm). Elevando el ritmo a 130 km/h, el consumo ya no es tan destacable, como ocurre también en la ciudad, aunque siempre en valores inferiores a 10 litros/100 km. En este punto, hay que señalar que con 41 litros, el tanque no ofrece gran autonomía en ámbito 100% urbano. En la teoría, el alcance es de 440 km, pero con tránsito denso difícilmente se llegue a 400 kilómetros.
En términos dinámicos, y como también habíamos señalado con March y Versa, la puesta a punto de las suspensiones está más orientada al confort que al desempeño dinámico, probablemente pensando en el gusto del consumidor norteamericano, principal destino de estos producto. Así, cuando se lo exige en curvas de baja y media velocidad, el Note no oculta evidentes inclinaciones de la carrocería, aunque sin llegar a ser inestable. En autopista, a velocidades legales, la insonorización está bien lograda gracias al doble burlete en las cuatro puertas y al mencionado bajo coeficiente aerodinámico (está a la altura de la coupé 370Z de Nissan). Al volver a la ciudad, el confort de marcha resulta otro punto a destacar, debido a la dirección eléctrica y a un esquema de suspensión que filtra bien los empedrados e imperfecciones del asfalto. Además, difícilmente toque abajo en lomos o cunetas, aunque merecería una mínima protección en la parte baja del motor.
Instrumental completo, con el bienvenido medidor de temperatura de agua del motor.
EQUIPAMIENTO
En seguridad y siempre de serie desde el nivel básico Sense, el Note ofrece distribución electrónica de frenado (EBD) y asistencia en urgencia (BA) como complementos del sistema antibloqueo (ABS), que junto al doble airbag frontal son obligatorios por ley en Argentina desde 2014. A eso agrega cinco cinturones de tres puntos de fijación y anclajes Isofix para sillas infantiles (con enganche superior Latch). Además, como exclusividad de esta versión “full”, adiciona faros antiniebla delanteros, que deberían, desde luego, ofrecerse al menos desde el nivel intermedio Advance.
Entre los faltantes, anotamos el quinto apoyacabeza, el faro antiniebla trasero y, considerando que se trata de una versión “full” que busca posicionarse frente a rivales modernos dentro del segmento, debería incluir al menos airbags laterales. Y por qué no, también control de estabilidad (ESP), un dispositivo que si bien no ofrece el Fit, sí incluyen algunos de los hatchback contra los que buscará competir el Note (Fiesta y Fox).
Con mejoras, el naftero 1.6 eleva su potencia hasta 110 CV (en March y Versa, 107 CV).
A nivel confort, lo más destacado de la versión Exclusive es el sistema multimedia con pantalla táctil de 5,8 pulgadas, que incluye navegador satelital, conectividad Bluetooth, puerto USB, entrada auxiliar y reproductor de CD. Otro diferencial es la cámara de estacionamiento trasera, aunque sin sensor sonoro (ya hemos dicho que a nuestro juicio, lo primero no exime de lo segundo). Al margen de lo mencionado, el Note propone, de serie desde la versión más básica, control de velocidad crucero, arranque por botón e ingreso “sin llave” (sólo hay que tenerla en el bolsillo y la puerta se abre presionando un botón).
¿Qué más se le puede pedir? Además del sensor sonoro de estacionamiento, se le podría agregar, siempre en el nivel Exclusive, climatizador (en lugar de aire acondicionado convencional), espejo interno de oscurecimiento automático y “one touch” para todas las ventanillas (sólo ofrece dicha función para el conductor y únicamente para bajar el vidrio).
Butacas de mejorable sujeción lateral. El volante se regula en altura pero no en profundidad.
CONCLUSIÓN
Como quedó dicho, el Note no sólo llega al mercado argentino para competir frente al Honda Fit, su rival más natural. También buscará captar clientes habituados a los hatchback modernos, como Ford Fiesta, Volkswagen Fox, Peugeot 208, Chevrolet Sonic o Citroën C3, entre otros.
Con un diseño atractivo y buen equipamiento de confort, el Note probablemente llame la atención del público joven. También, considerando el amplio espacio interior, será una opción ideal para quien habitualmente lleve pasajeros adultos atrás, sobre todo si son de contextura física grande. En contrapartida, donde difícilmente encuentre respuesta es en la familia tipo, por la mencionada limitación de la capacidad del baúl.
Pero en cualquier caso, el Note genera una ampliación de la oferta de Nissan nada menos que en el segmento más grande de la industria automotriz argentina. Así, la marca ahora ofrece una nueva alternativa para sus usuarios actuales y también para captar nuevos clientes. El Note no reemplaza a ningún modelo de la oferta actual de Nissan, sino que llega para sumar. Y eso es clave para que la casa japonesa siga creciendo en volumen de ventas y participación de mercado a nivel local. Un camino que ya está recorriendo y en el que promete un importante ascenso en los próximos años.
Baúl pequeño, de 272 litros, que incluye un doble fondo. El auxilio está debajo del chasis.
Gran espacio para las piernas de los pasajeros traseros. Al nivel de un sedán mediano.
El Note compite contra el Honda Fit pero también frente a varios hatchback modernos.