Opinión: Ford Bronco Sport 2.0 Wildtrak en Argentina

Qué me gustó y qué le reclamo al SUV de perfil off road. Las prestaciones, los consumos y mis sensaciones, desde la versión tope de gama, de USD 54.000.

Por Martín Egozcue
martin.egozcue@carsmagazine.com.ar
Fotos: Claudio Arena – Instagram: @arena.ph

> QUÉ PROBÉ <
El Nuevo Bronco es la sexta generación del SUV de Ford, que revive la denominación utilizada entre 1966 y 1996 por el famoso todoterreno del óvalo. Presentado en los Estados Unidos en 2020, el Nuevo Bronco ya está en fase de preventa en la Argentina, en la versión Bronco Sport. Basado en la plataforma “Ford C2” (la misma del Kuga y de la futura pickup Maverick), se trata de un SUV de segmento C, de vocación aventurera y con reales aptitudes off road, aunque sin perder practicidad para el uso urbano y hasta familiar. Se diferencia del Bronco (a secas), que también acaba de relanzarse; pero en este caso, en versiones de 2 y 4 puertas, ya en el segmento D, y con un posicionamiento de off road mucho más extremo (chasis de largueros y reductora).

> QUÉ ME GUSTÓ <
+ Diseño y estética que respeta la historia del Bronco y a la vez, bien modernizado
+ Gran calidad percibida, sobre todo en el interior, en materiales y terminaciones
+ Motorización de elevada potencia y torque, al tope de la propuesta del segmento
+ Aceleración y elasticidad, con 7,7s de “0 a 100” y 6,9s de “80 a 120”; son cifras propias de un auto deportivo, destacables en un SUV dentro de este segmento
+ Desempeño todoterreno real, con recursos y aptitudes que lo ubican por encima del promedio del segmento de los SUVs medianos equipados con tracción integral
+ Sistema de tracción “GOAT” con 7 modos de conducción, de gran eficiencia (según la elección, se modifica la respuesta de motor, caja, frenos y dirección)
+ Bloqueo de diferencial trasero (mediante dos embragues que se acoplan en el eje trasero), algo ideal para situaciones complejas de trepadas en off-road (lo que algunas pickups mid-size olvidan, el Bronco Sport lo plasma en el segmento SUV)
+ Trail Control, un sistema que regula la aceleración y el frenado sobre terrenos off-road a baja velocidad (y así el conductor se concentra sólo en guiar la dirección)
+ Sistema de suspensión bien mullido, de gran confort, incluso en situaciones de off-road exigentes (suspensión trasera multibrazo y neumáticos de perfil “65” y además, con topes hidráulicos en los amortiguadores delanteros, un aspecto clave en esto)
+ Capacidad de vadeo de 60 centímetros, no muy lejos de una pickup mediana
+ Despeje superior a 22 centímetros y buenos ángulos para desempeño off-road
+ Cámara frontal de 180º (además de la trasera), ideal para maniobras de off-road
+ Dos ganchos de rescate delanteros y un gancho de rescate trasero (muy bien ahí)
+ Neumáticos aptos para el off road, con dibujo All Terrain (Pirelli Scorpion), una característica específica de esta versión Wildtrak (la Big Bend tiene dibujo “rutero”)
+ Auxilio homogéneo (sólo en versión Wildtrak), con neumático idéntico a los montados, en llanta de chapa; algo indispensable en un SUV que invita al off-road
+ Nueve airbags, incluyendo rodilla para conductor y laterales delanteros y traseros
+ Seguridad con ADAS que la marca denomina “Ford Co-Pilot 360”, con frenado autónomo, control crucero adaptativo con “stop & go”, alerta de punto ciego, asistente de mantenimiento de carril y luces altas automáticas, entre otros
+ Distancia de frenado, con sólo 38,5 metros de “100 a 0”, destacable para su porte
+ Habitabilidad trasera con muy buena altura para la cabeza debido al “Safari Roof” (techo de doble altura), aunque la 5ª plaza no sea la más generosa para un adulto
+ Multimedia SYNC 3 de 10”, con GPS nativo y Android Auto y Apple CarPlay
+ Sistema de audio Bang & Olufsen con 10 parlantes, de impecable sonoridad
+ Cargador inalámbrico de celular, además de muchos puertos de carga: dos USB, dos Tipo C, dos tomas 12v y dos tomas de 220v (entre adelante, atrás y el baúl)
+ Relación precio-producto frente a varios posibles competidores del segmento, que siempre en valores de lista convertidos a dólar oficial, superan las cifras del Bronco

> QUÉ LE RECLAMO <
– Consumo más contenido o al menos, tanque un poco más grande, para mejorar las cifras de autonomía (sobre todo en circuito urbano, con casi 15 litros/100 km, en tránsito “normal” e incluso utilizando el sistema de arranque y parada “Start&Stop”)
– Selector de cambios convencional en lugar de ruedita giratoria, que si bien luce moderna, no me parece tan intuitiva al momento de operarla (hay que bajar la vista)
– Baúl un poco más grande, ya que hasta la altura de los respaldos traseros no se destaca precisamente por un volumen generoso para el equipaje de una familia
– Faro antiniebla trasero (un raro olvido, considerando el nivel de seguridad general)

> PRESTACIONES <
Velocidad máxima: 197 km/h (en Dª a 5.500 rpm)
Aceleración 0-100 km/h: 7,7 segundos
Elasticidad 80-120 km/h en Dª: 6,9 segundos
Frenada 100-0 km/h: 38,5 metros
(*) Velocidad, aceleración y elasticidad medidas con instrumental GtechPro
(*) Distancia de frenado medida a 100 km/h reales, en calle de pruebas
(*) Mediciones sólo con conductor abordo y tanque lleno de combustible

> CONSUMOS <
Urbano: 14,6 litros/100 km
Velocidad promedio: 21 km/h
Autonomía: 410 km

A 100 km/h: 7,7 litros/100 km
Régimen: Dª a 1.700 rpm
Autonomía: 779 km

A 130 km/h: 10,1 litros/100 km
Régimen: Dª a 2.200 rpm
Autonomía: 594 km

Capacidad del tanque: 60 litros
Combustible indicado: nafta Grado 2
(*) Consumos a velocidades reales con instrumental GtechPro
(*) Mediciones de consumo con climatizador encendido y sistema Start&Stop

> FECHA DE LANZAMIENTO <
Marzo 2021 (preventa)

> ORIGEN <
México

> MECÁNICA <
Motor turbo-naftero EcoBoost de 2.0 litros, 4 cilindros y 16 válvulas, con 240 CV de potencia a 5.500 rpm y 373 Nm de torque a 3.000 rpm. Distribución por cadena. Transmisión automática de ocho velocidades, de convertidor de par, con opción secuencial y levas al volante. Tracción integral de acople automático, con modo Lock (reparte 50/50 adelante-atrás, hasta los 80 km/h) y Sistema de Gestión de Terrenos (GOAT, que inglés significa “cabra” pero también refiere a “Go Over Any Type of Terrain”), con 7 modos de conducción (Normal, Eco, Deportivo, Resbaladizo, Arena, Lodo y Roca). Además, bloqueo electrónico de diferencial trasero. Dirección con asistencia eléctrica. Frenos delanteros y traseros a disco. Suspensión trasera multibrazo y delantera con topes hidráulicos en amortiguadores.

> DIMENSIONES Y PESOS <
Largo: 4,38 metros
Ancho: 1,88 metros (con espejos: 2,09 metros)
Alto: 1,81 metros
Entre ejes: 2,67 metros
Despeje: 22,3 centímetros
Capacidad de vadeo: 60 centímetros
Ángulos: ataque, 30º; salida, 33º; ventral, 20º
Baúl: 566 litros medidos hasta el techo (así lo declara Ford)
Peso: 1.681 kg (en orden de marcha)

> RODADO Y AUXILIO <
Neumáticos: Pirelli Scorpion ATR 225/65 R17
Auxilio: neumático homogéneo, en llanta de chapa (o sea, no es temporal)

> VERSIONES Y PRECIOS <
Big Bend 1.5 175 CV AT8 4×4: USD 44.200
Wildtrak 2.0 240 CV AT8 4×4: USD 54.000 (*)
(*) Versión evaluada; precios vigentes a abril 2021

> GARANTÍA <
3 años o 100.000 km

> POSIBLES RIVALES <
Disponible sólo con tracción 4×4, el Bronco Sport (en cualquiera de sus versiones, Big Bend o Wildtrak) apunta a una franja específica del segmento de los SUV medianos. El rival más directo podría ser el Jeep Compass, que propone opciones de tracción integral e incluso la versión Trailhawk, la más orientada al off road, pero con motorizaciones turbo-diésel. De todas formas y aunque con otro concepto de producto, hay varios otros SUVs de este tamaño con tracción 4×4 en el mercado argentino: Ford Kuga, Honda CR-V, Nissan X-Trail, Chevrolet Equinox, Hyundai Tucson y Subaru Forester.

> FICHA TÉCNICA + EQUIPAMIENTO <
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> GALERÍA DE FOTOS <

A pesar su altura y porte, el Bronco Sport transmite seguridad al volante.

Y no sólo en el asfalto: fuera de la ruta se desenvuelve con gran soltura.

Es un SUV de segmento C (mediano), orientado al off road y la aventura.

En la Argentina, su rival más directo sería el Jeep Compass 4×4 Trailhawk.

Probé el Wildtrak, con el 2.0 de 240 CV. La otra opción: Big Bend 1.5 de 175 CV.

Me encanta el diseño: respeta el ADN del Bronco, pero luce bien contemporáneo.

La versión Wildtrak cotiza a USD 54.000, mientras que la Big Bend, a USD 44.200.

El Bronco Sport tiene 22 cm de despeje, además de varias otras aptitudes off-road.

Bronco Sport es un SUV de perfil off road pero también apto para el uso en ciudad y hasta en familia. No confundir con el Bronco, de perfil 100% off road, más extremo.

Llega desde México y al no tener arancel de importación, quedó bien posicionado.

Claro, no es “barato”, pero creo que su relación precio-producto lo deja muy bien parado frente a otros SUV de tracción 4×4 que hoy propone el mercado argentino.

Neumáticos pensados para off road, a tono con el perfil que transmite Bronco Sport.

Se lanzó en fase de preventa en marzo, con entregas previstas para fines de abril.

El Bronco se luce en seguridad, con gran dotación. Pero no tiene antiniebla trasero.

Buenos ángulos para off road. Anotá: de ataque, 30º; de salida, 33º; y ventral, 20º.

Suspensión trasera multibrazo; y adelante, topes hidráulicos en amortiguadores. Resultado: suspensión bien mullida y muy confortable, tanto en “on” como “off road”.

Barras de techo en esta versión. A velocidad elevada puede generar turbulencias.

Aplausos para el motor EcoBoost turbo-nafta 2.0 de 240 CV y 373 Nm de torque.

De “0 a 100” en sólo 7,7 segundos, con casi 200 km/h de velocidad final.

Mi prueba de frenada lo dejó muy bien parado, con sólo 38,5 metros de “100 a 0”.

Gran percepción de calidad transmite el interior del Bronco Sport. Aplausos ahí.

Volante de excelente grip, buen diseño, doble regulación, con cuero “soft touch”.

Instrumental híbrido entre analógico y digital; claro y de completa información.

Bronco Sport tiene las ADAS de “Ford Co-Pilot 360”, como crucero adaptativo, frenado autónomo y mantenimiento de carril, entre otras ayudas a la conducción.

Así es la selectora. Es moderna y ahorra espacio. Pero me costó familiarizarme. Hay que bajar la vista y me resultó más lenta de operar que una convencional.

La caja automática (convertidor de par) de 8 velocidades tiene levas al volante.

De lo mejor del Bronco Sport: el sistema GOAT con hasta siete programas de conducción off road, que modifican la respuesta del vehículo en función del terreno.

Me gustó la combinación bitono entre marrón y negro, y el inserto en alcántara.

Ese caballo tiene muchas ganas de galopar. Y el Bronco Sport te invita a hacerlo.

Ajustes eléctricos para el conductor, incluido lumbar. Gran posición de conducción.

Techo corredizo eléctrico, ítem diferencial de la versión Wildtrak, entre varios otros.

Climatizador bizona y asientos calefaccionados. Sólo le faltarían ser ventilados.

Cargador inalámbrico de celular y muchos puertos, USB, tipo C y hasta de 220 volts.

Atrás es amplio, pero la 5ª plaza penaliza con el túnel de transmisión (verdadero).

Sentado detrás de “mi otro yo”, me sobra espacio para las piernas y la cabeza.

Bronco Sport propone muchos portaobjetos. Este bolsillo es uno muy práctico.

Salidas de aire traseras y otro enchufe de 220 volts, ideal para una heladerita.

SYNC 3 en pantalla de 10 pulgadas, compatible con Android Auto y Apple CarPlay.

Tiene GPS nativo, pero también podés espejar, por ejemplo, Google Maps.

Desde luego, también aplicaciones de música como Spotify.

Tiene cámara trasera y también delantera, de 180 grados, ideales para el off road.

Práctica solución: apertura de luneta individual para objetos más pequeños.

Baúl con revestimiento en goma, para resistir maltratos (también en respaldos).

Bravísimo: auxilio homogéneo en neumático, como debería ser siempre y en especial, en un vehículo de perfil off road. Si pinchás, podrás seguir como si nada.

Piso casi plano al rebatir los asientos, que pueden plegarse en 1/3 o 2/3.

Para la vida al aire libre: una mesa desplegable, ideal para el picnic en la aventura.

Lo probé a fondo, en la ciudad, la ruta y claro, fuera del asfalto. Gran foto de Claudio Arena, en la hora mágica, en el lugar indicado, para que Bronco Sport se luzca así.

Creo que Bronco Sport es hoy la nueva referencia del segmento de los SUV medianos, y sobre todo si pensamos en vehículos de prestaciones off road.

Diseño, calidad, mecánica, prestaciones “on” y “off road”, seguridad y relación precio- producto. Todos atributos que dejan muy bien parado al Bronco Sport.

Por si no quedó claro: Bronco es una submarca de vehículos 4×4 de Ford. Pero sólo aquí aparece el óvalo. No lo vas a encontrar en ningún otro lugar del vehículo…

Ojalá que Ford Argentina, en algún momento, decida acompañar el lanzamiento del Bronco Sport con alguna versión del Bronco a secas, y así completar la familia. Creo que estos productos tienen un potencial enorme en nuestro país. El tiempo lo dirá…