Ahora fabricado en Brasil, el citycar del rombo dejó atrás las cero estrellas de Global NCAP y alcanzó tres en protección para ocupantes adultos y niños.
El Renault Kwid obtuvo tres estrellas (sobre cinco posibles) en protección de pasajeros adultos en las pruebas de choque realizadas por Latin NCAP, el organismo que evalúa la seguridad de los vehículos comercializados en América Latina. El citycar de la marca francesa, que se fabrica en Brasil y está en fase de preventa en Argentina (ver más aquí), consiguió tres estrellas en protección de ocupantes infantiles.
Las unidades evaluadas contaban con cuatro airbags (dos frontales y dos laterales), frenos ABS, anclajes Isofix y pretensores en los cinturones de seguridad delanteros. Todos estos equipamientos los ofrece de serie en el mercado argentino.
Fabricado en India, este modelo había sido evaluado por Global NCAP a principios de 2016. En aquel momento, sin bolsas de aire, obtuvo el puntaje más bajo: cero estrellas. El comportamiento del Kwid brasileño mejoró “gracias a los refuerzos estructurales y a los agregados en equipamiento de seguridad”, señaló el Secretario General de Latin NCAP, Alejandro Furas.
“En el impacto frontal, la protección ofrecida a la cabeza y al cuello del conductor fue buena; la recibida por el pecho del conductor fue marginal y la del acompañante fue adecuada. Las rodillas del conductor y el acompañante ofrecieron protección marginal dado que podrían impactar con estructuras peligrosas detrás del tablero”, asegura Latin NCAP.
A su vez, el organismo latinoamericano reconoce que “la zona del área de los pies fue considerada como estable” y que “tuvo deformación insignificante”. Es por eso que la estructura del habitáculo “fue considerada como estable”, según el comunicado oficial.
En el impacto lateral con barrera, Latin NCAP detectó que “el airbag de tórax ofreció protección débil para el pecho, mientras que el auto brindó protección adecuada para el abdomen y cabeza, y buena protección para la pelvis”. El impacto lateral con poste no se realizó porque el Kwid no tiene airbags de cortina.
Por otra parte, el comunicado sostiene que el Sistema de Retención Infantil (SRI) para el niño de tres años “fue capaz de evitar un desplazamiento excesivo hacia adelante durante el impacto frontal, por debajo de los límites permitidos”. Además, que “el dummy de 1 año recibió buena protección en ambos impactos”.
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Muy bien por Renault, que hace poco con el Captur y ahora con el Kwid demostró que cuando se quiere construir un auto seguro, se puede.
Espero que el resto de los fabricantes sigan este ejemplo, Fiat con el Mobi, o GM con el Onix por ejemplo.
Saludos.