Según informaron hoy distintos medios europeos, desde ambas partes se reconoce que “el proceso ha sido fácil, en buena medida porque Ford quería vender cuanto antes y Tata, comprar para tener una cabeza de puente en los mercados internacionales”.
Un dato importante es que en un plazo mínimo de cinco años, Ford seguirá suministrando motores, transmisiones y plataformas para los modelos de Jaguar y Land Rover que han sido renovados recientemente. Es que hoy por hoy, Tata carece de la capacidad de producir ese tipo piezas. Pero tampoco se esperan grandes cambios en la gestión. Tata es un líder mundial en este terreno y tendría ya a punto las herramientas informáticas para reemplazar a las de Ford, que estaban integradas con las de otras marcas de la compañía.