Para el período diciembre-febrero, la base no imponible subirá un 8,79 por ciento para ajustarse al aumento de los precios de los vehículos, adelantó Ámbito.
A través de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el Gobierno de la Nación actualizará la Ley de Impuestos Internos para el mercado automotor. Desde el 1º de diciembre de 2021 y hasta el 28 de febrero de 2022, regirán nuevas bases imponibles, reveló un informe del diario Ámbito (ver aquí), del colega Horacio Alonso.
Con esta actualización, en base al medio citado, el impuesto automotor afectará a modelos que se comercialicen con precios al público finales a partir de $3.430.000, aproximadamente. La suba del 8,79 por ciento en la alícuota se justificará con el aumento de los precios mayoristas de los vehículos (SIPM) en el trimestre de julio, agosto y septiembre.
Esta medida debe todavía ser confirmada por el Gobierno. De no mediar imponderables, debería ser anunciada a través del Boletín Oficial durante los últimos días de noviembre. La Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), por lo pronto, se hizo eco del informe de Ámbito y confirmó la información en sus redes sociales.
Hoy por hoy, la primera escala del impuesto interno afecta con un 20 por ciento a modelos con precio de venta de la terminal al concesionario de $2.216.200. Al público, son alrededor de $3.120.000 (el número puede variar por el IVA y el margen de la comisión). Y la segunda escala grava con un 35 por ciento a aquellos con precios mayoristas iguales o mayores a $4.091.446, valor que al público es de alrededor de $7.960.000.
El “impuesto al lujo”, tal cual se lo denominó popularmente, afecta a los modelos de gama media y alta desde enero de 2014, cuando fue implementado por primera vez. En los últimos siete y años y medio, las bases no imponibles fueron subiendo y bajando, pero el tributo sigue ahí. Para las automotrices, se trata de un gravamen distorsivo.
Por el momento, las pickups continuarán exentas de este impuesto por tratarse de vehículos comerciales. Es una buena noticia, ya que en la Argentina se producen varias medianas (Hilux, Amarok, Ranger, Frontier y Alaskan), aunque el tributo sí afecta a la Toyota SW4 y al Volkswagen Taos, ambos de industria nacional. Hay más modelos regionales afectados, como por ejemplo el Jeep Renegade (versión Trailhawk), el Jeep Compass y el Toyota Corola Cross.
La experiencia indica que este gravamen provoca dos consecuencias directas: el “topeo” en el precio de algunos modelos sobre el límite del mínimo no imponible para quedar afuera y el aumento excesivo en el valor de los que están afectados, muchas veces seguido por la retirada del mercado dado que su precio queda muy desfasado. Además, toda esta distorsión alimenta los sobreprecios.