Es la versión SUV de la Ranger. Tiene tres filas de asientos, hasta nueve airbags y una gama mecánica variada. ¿Estará en Pacheco junto a la pickup?
Por Redacción – CarsMagazine.com.ar
Ford reveló todos los detalles de la nueva generación del Everest, el SUV mediano que tiene chances concretas de producirse en la planta de Pacheco, Buenos Aires. La clave: es la versión carrozada de la nueva Ranger (ver aquí), pickup que se fabricará en la Argentina a partir de 2023 fruto de una millonaria inversión (USD 500 millones).
El nuevo Ford Everest copia el diseño de la Ranger, pero se distingue lógicamente desde el pilar C hacia atrás, donde agrega una tercera fila de asientos para alcanzar una capacidad de siete pasajeros. Las butacas de la segunda fila se deslizan más hacia adelante que antes para facilitar el ingreso a la tercera. Según la versión, hay tomas corriente para todos los ocupantes.
La segunda fila de asientos se puede rebatir 60:40 y la tercera, 50:50 con tan solo tocar un botón. Ford dice que ambas fueron “diseñadas para plegarse y permitir el transporte seguro de cargas largas”. En el sector trasero hay protectores de cargas y espacios guardaobjetos debajo del piso para mantenerlo “organizado”.
El Everest 2023 promete un interior “más refinado y cómodo”, con materiales de alta calidad. También mucha tecnología: incorpora un instrumental de hasta 12,3 pulgadas y una pantalla táctil central de hasta 12 pulgadas, según la versión, para el sistema de información y entretenimiento SYNC4.
El equipamiento del nuevo Everest incluye una cámara de 360 grados con pantalla dividida para facilitar el estacionamiento en espacios urbanos y para ayudar al conductor cuando transita por una superficie complicada. También viene con otras asistencias de manejo tales como el control de velocidad crucero adaptativo, el mantenimiento de carril y la frenada autónoma pre-colisión.
Otro punto alto son los nueve airbags que ofrece en las versiones tope de gama. A los clásicos dos frontales, dos laterales delanteros y dos laterales de cortina, suma dos de rodilla delanteros (uno de cada lado) y uno delantero central entre el conductor y el acompañante, a fin de protegerlos en un impacto lateral antes de que se golpeen entre sí.
La gama mecánica estará compuesta por tres opciones: al tope habrá un turbo-diésel V6 3.0 litros, mientras que las versiones más accesibles contarán con un biturbo-diésel 2.0 litros y un naftero 2.3 litros EcoBoost. La transmisión será automática de seis o diez velocidades, de acuerdo a la variante elegida.
Esta generación aumenta la altura libre del suelo 5 centímetros, presenta ajustes en la configuración de los amortiguadores y ofrece una capacidad de vadeo de hasta 80 centímetros. Ford asegura que mejora el rendimiento en todas las superficies frente al modelo al que reemplazará.
Si el Everest llegara a producirse en la Argentina (un informe publicado por Ámbito sugiere que está en análisis y algunos medios de Brasil lo dan por hecho), será un rival de fuste para las actuales Toyota SW4 (está basada en la pickup Hilux) y Chevrolet Trailblazer (en la S10).
