La marca del óvalo continúa el desarrollo de vehículos que puedan conectarse unos a los otros de forma inalámbrica. Así, se podrían evitar más del 80 por ciento de los roces, toques o choques menores, incluso si la visión del conductor estuviera obstruida.
Ford continúa el desarrollo de vehículos inteligentes que puedan conectarse de forma inalámbrica, y así la marca busca convertirse en la primera automotriz en construir prototipos de demostración. En virtud de ese compromiso, en 2011 el óvalo duplicó su inversión en investigación para esta clase de automóviles.
Estos vehículos podrían ayudar a prevenir el 81% de roces, toques o choques menores que por la mínima violencia del impacto no generan lesiones en los pasajeros. Esta nueva tecnología, sobre la que Ford trabaja desde hace más de una década, permite que los automóviles se “hablen” unos con otros en forma inalámbrica utilizando avanzadas señales Wi-Fi o frecuencias de onda corta específicas en canales seguros.
A diferencia de lo que sucede con los dispositivos de seguridad de los radares, que identifican riesgos dentro de la línea directa de su propia visión, esta tecnología Wi-Fi basada en sistemas de radio permiten tener un alcance completo del perímetro, detectando en 360° situaciones potenciales de riesgo. Incluso, si la visión del conductor está obstruida.
Algunas de las aplicaciones de esta tecnología les permitirá a los conductores recibir un alerta si su vehículo se dirige en dirección a colisionar con otro en un cruce, si un vehículo delante disminuye la velocidad repentinamente o si el patrón de tráfico cambia, por ejemplo, al ingresar en una autopista cargada de vehículos. Este sistema, también, podrá advertir al conductor ante un riesgo de colisión al cambiar de carril, al aproximarse a un automóvil o si algún otro vehículo pierde el control.
Ford planea incorporar una veintena de ingenieros, científicos y planificadores de todo el mundo con experiencia en seguridad, eco-movilidad, info-entretenimiento y conveniencia de conducción para acelerar el desarrollo de los vehículos inteligentes, cuyos dispositivos proveerán un amplio rango de beneficios a sus clientes.