La marca alemana lo presentó al público por primera vez y confirmó la fecha de lanzamiento en Argentina. Cómo será la gama del camión 100% eléctrico.
Por Guillermina Fossati
El Volkswagen e-Delivery, un camión totalmente eléctrico, hizo su primera aparición en público en la Argentina. La marca alemana lo presentó en el marco de Expoagro (ver aquí), la feria más grande del sector agro-ganadero, ya que considera que no estará destinado únicamente al transporte urbano. Y confirmó su lanzamiento para el segundo semestre de 2023.
“Sumamos el e-Delivery a Expoagro para que los visitantes conozcan cómo es un camión eléctrico, se saquen las dudas, hagan preguntas. Y que vean que no es peligroso, que no es sólo un aspiracional”, explicó a TruckMagazine.com.ar el gerente comercial de Volkswagen Camiones y Buses en Argentina, Juliano Ruggieri.
La marca alemana considera que este camión 100 por ciento eléctrico “no es un producto para usar sólo en el reparto en ciudades”. “El campo puede estar más alejado, pero igual usa cosechadoras, sembradoras y un montón de máquinas eléctricas. De la misma forma se puede operar un camión eléctrico en propiedades medianas y chicas, en recorridos internos, así como en centros de distribución, zonas urbanas y otros tantos lugares”, dijo Ruggieri.
No es la primera vez que el e-Delivery pisa suelo argentino. En setiembre de 2022, una unidad fue presentada a la prensa especializada y allí estuvo este medio para tomar un breve contacto al volante (ver aquí).
“Ya hemos hecho pruebas con este camión en el país. Tenemos varios clientes corporativos que lo están reservando y que lo tendrán en sus manos apenas lo lancemos”, aseguró el directivo.
En una primera etapa, el e-Delivery estará disponible en dos versiones: el e-Delivery 11 toneladas 4×2, con un peso bruto total de 10.700 kg y una capacidad máxima de carga útil, sumada a la carrocería, de 6.320 kg; y el e-Delivery 14 toneladas 6×2, con un peso bruto total de 14.300 kg y una capacidad máxima de carga útil, sumada a la carrocería, de 8.755 kg. Ambos traerán un motor de 300 kW con 2.150 Nm de par máximo y 408 CV. Se podrán combinar con una batería de ion de litio de tres packs 610 v/106 kwh, que rinde 110 kilómetros de autonomía, y otra de 6 packs 640 v/193 kwh, que rinde 250 kilómetros.
LA RELACIÓN COSTO-BENEFICIO, UN PUNTO CLAVE
Cuánto ahorra este camión en relación con un diésel es la gran pregunta de los usuarios. Para responderla, Volkswagen analizará puntualmente cada caso, ya que los números cambian de acuerdo al cliente. La marca brindará atención de forma personalizada y explicará qué pack de baterías se necesita para cada operación, así como las toneladas del vehículo indicadas para cada aplicación.
Además, con el socio comercial Simmens, Volkswagen le recomendará al cliente cuál es el mejor cargador para adquirir y tener la carga rápida de su batería. Un dato clave: el tiempo que lleva la carga completa depende del cargador, que a mayor potencia requiere menos tiempo. El más potente, que carga un e-Delivery en una hora, sale cerca de 60 mil dólares.
“No hay un número mágico como promesa de reducción del costo operativo, sino que hay varios factores que definirán el punto de inflexión y la utilidad será mayor a partir de ese momento. No hay una regla básica y depende de cada uso en cada operación”, explicó Ruggieri.
Lo mismo sucederá con la configuración según las necesidades. El e-Delivery podrá ser de 5 metros para la configuración 6×2 y de 4,5 metros para la 4×2. Evaluar el tipo de transporte a realizar es un paso esencial para decidir cuál será la opción más conveniente. A mayor cantidad de baterías hay más autonomía, pero menor capacidad de carga útil. El mayor volumen o peso a transportar será fundamental para la mejor elección.
Cuánto costará el e-Delivery es otro dato fundamental para los usuarios. Volkswagen asegura que no está definido, pero estima un valor aproximado cuatro veces mayor al del Delivery (hoy posiconado en torno a los 60.000 dólares). Esto significa que el eléctrico superaría los 200.000 dolares. Ese mismo precio tiene en Brasil, donde vale (en reales) el equivalente a unos 220.000 dólares.
“Entendemos que los clientes tendrán que aprender. Esperamos que crezca mucho la penetración, pero todo dependerá de cómo responde el uso del camión a la operación del cliente. Ya tenemos demanda de 15 o 20 unidades no sólo para reparto urbano, sino para transporte general”, agregó Ruggieri.