Renault anunció oficialmente el regreso de uno de los nombres más célebres de la marca francesa, que tuvo en la Argentina en particular una gran penetración: el emblemático Gordini. Aunque como anunciáramos días atrás, no será un nuevo modelo vintage modernizado, sino que simplemente se tratará de retoques estéticos y de equipamiento, basados en las versiones RS (Renault Sport).
Según los anuncios realizados en Francia, los nuevos Gordini van a identificar una nueva línea de deportivos de la marca. El primer modelo en incorporar el espíritu será el Twingo Gordini RS, que será presentado el 25 de noviembre en París. También se confirmó que en segundo término se lanzará una versión Clio Gordini RS, que saldrá a calles europeas algunos meses después. Aparentemente, la versión del Mégane también llegará, pero tendrá que esperar algo más.
La característica más llamativa será el color azul con dos franjas blancas que identificó a este auto en Europa entre las décadas del ‘50 y el ‘70, pero que no se conjugan con los que están presentes en el imaginario argentino. Además, habrá colores específicos y un kit de carrocería, aunque sin mayores opciones de personalizado más allá de lo que traigan de serie.
El Renault Gordini se hizo muy popular en la Argentina en los años ‘60, después que la planta de Industrias Kaiser Argentina (IKA) en Santa Isabel (Córdoba) firmara el acuerdo para producir vehículos IKA-Renault. En julio de 1960 nació allí el primer Renault Dauphine (antecesor del Gordini) nacional. Estaba equipado con un motor Ventoux de 4 cilindros, caja de tres marchas y tenía un consumo de 6,7 litros cada 100 kilómetros. La potencia alcanzaba a los 31 CV, desarrollando una velocidad máxima de 117 km/h. Era una excelente opción para el usuario del auto chico, con cuatro puertas y un amplio baúl delantero.
Mas adelante, en 1963, Renault produjo el Gordini, una versión corregida y con mayores prestaciones que el Dauphine. Las diferencias entre uno y otro radicaban sustancialmente en la parte mecánica y en la transmisión. Tenía caja de 4 marchas y 36 CV, siendo su velocidad final de 130 km/h y su consumo, 7,2 litros cada 100 kilómetros. De este modelo se produjeron en la planta de Santa Isabel 34.565 unidades, culminando en la década del ‘70, según rememoran en el Club Renault Gordini de Argentina.
