CarsMagazine.- La automotriz Ford presentó el modelo S-Max en la Argentina, un novedoso monovolumen para siete pasajeros que combina la flexibilidad de un familiar, el diseño de un deportivo y el equipamiento de un coche de alta gama. Se comercializará a partir del 27 de febrero en versiones diesel y nafta, por 148.900 y 158.900 pesos, respectivamente.
El S-Max llega al país importado desde Bélgica, donde se produce en la planta que Ford posee en la localidad de Genk, el mismo lugar donde se fabrica el Nuevo Mondeo que desde el año pasado se vende en la Argentina. Se trata de un vehículo que arriba con el importante pergamino de haber sido premiado como “Auto del Año en Europa” en 2007 y que obtuvo la máxima puntuación (cinco estrellas) en la prueba de seguridad de la EuroNCAP. Además, es el segundo automóvil, luego del Mondeo, que llega al país portando el gen del “Kinetic Design”, la nueva línea de diseño de los automóviles de Ford a nivel mundial.
“Anunciamos en el último Salón de Buenos Aires que presentaríamos siete novedades y ésta, el S-Max, es la quinta. En poco tiempo más llegará el Nuevo Ka, y hacia mitad de año, el lanzamiento de un nuevo automóvil…”, remarcó Jorge Di Nucci, Director de Relaciones Institucionales de Ford Argentina. Ese séptimo producto no es otro que el Nuevo Focus, que se fabricará en la planta de Pacheco (ver nota aparte más abajo).
El S-Max marca el ingreso de Ford al segmento de los monovolúmenes, donde no tenía presencia. Según Diego Rousseaux, Gerente de Producto de Ford Argentina, se trata de “un auto innovador, que rompe con todos los moldes, que crea un nuevo segmento, combinando los conceptos de flexibilidad de un familiar, de diseño de un deportivo y de equipamiento de un auto de alta gama”.
Para la automotriz del óvalo, este nuevo producto que se suma a su oferta en la Argentina le permitirá competir, en primer lugar, con rivales como el VW Sharan, el Peugeot 807, el Chrysler Caravan y el Kia Magentis; y en segundo término, con otros posibles contrincantes como el VW Passat Variant, el Peugeot 407 SW y el Renault Mégane II Grand Tour.
El concepto de flexibilidad del S-Max se basa en la particularidad de poder elegir entre 32 combinaciones distintas de disposición del espacio interior, lo que permite obtener un volumen máximo de carga de hasta 2.000 litros con la segunda y tercera filas de asientos rebatidas. Además, ofrece 26 compartimentos para objetos y una capacidad para equipaje de 285 litros con las siete plazas ocupadas.
Además de un diseño seductor, el otro punto fuerte del S-Max es su equipamiento de confort y seguridad. Allí, entre lo más destacado, sobresalen el sistema de control por voz, de asistencia al arranque en pendientes, nueve airbag (incluido de rodilla para el conductor), sensor de estacionamiento delantero y trasero, de lluvia y crepuscular; control crucero adaptativo, sistemas ABS, de distribución electrónica de frenado y de asistencia al frenado de urgencia; y control de estabilidad (ESP). Además, cuenta con un sistema de alerta y asistencia ante un inminente choque frontal.
En el rubro motorización, el S-Max estará disponible en dos versiones: diesel turboalimentado Duratorq TDCI de 1.8 litros y 125 CV, con caja manual de seis marchas (versión Trend), y nafta Duratec HE de 2.3 litros y 161 CV, con transmisión automática secuencial de seis velocidades (versión Titanium). Los precios, como se apuntó, son 148.900 y 158.900 pesos, respectivamente.
Visualice el siguiente comercial televisivo del S-Max, el mismo que Ford utilizará para la campaña del producto en la Argentina.
Muy lindo, lo que no entiendo es a quien se lo van a vender porque es como mínimo un 25% más caro que cualquiera de los modelos contra los que supuestamente compite excepto el caso del 807 y la Caravan que a mi entender por tamaño son de otro segmento.