La versión “In Black” se ubica por encima de la denominada Luxe en cuanto a nivel de equipamiento, y respecto de ésta, agrega climatizador automático, sensores de lluvia, luminosidad y estacionamiento trasero, espejos eléctricos plegables, tapizado de cuero y cargador de 6 CD’s con MP3. Así, iguala la dotación que ofrece la versión Privilege, que se comercializa al mismo precio que esta especial.
Pero el “In Black” se diferencia del Privilege, además de por el color negro nacré, por los monogramas laterales que identifican la serie especial, las baguetas y molduras laterales en el mismo tono, y detalles interiores en cromo satinado en los paneles de puerta y el volante, además de una terminación símil aluminio en los cubre-zócalos delanteros.
El auto en sí ya es conocido en el mercado argentino, donde se comercializa desde 2005, primero proveniente de Turquía y luego fabricado en Brasil. Es un sedán del segmento C (mediano) que encuentra entre sus principales rivales al Peugeot 307, el Citroën C4, el Toyota Corolla, el Ford Focus y el Chevrolet Vectra. Las principales virtudes del Mégane II son el confort de marcha, el espacio interior y la capacidad del baúl, y como se apuntó, un interesante equipamiento de confort. Queda en deuda, sin embargo, en el apartado seguridad, con algunos faltantes llamativos.
El motor naftero de 2.0 litros y 138 CV le permite al Mégane II muy buenas reacciones en ciudad y más que respetables prestaciones en ruta. La aceleración de 0 a 100 km/h es de 9,8 segundos y la velocidad máxima es de 200 km/h. La transmisión manual de 6 marchas –un placer de conducción, con inserciones súper precisas– cae como anillo al dedo para que el impulsor “descanse” a velocidad lanzada y de esa forma se reduzca el consumo, que en el promedio ruta-ciudad arrojó 12,5 litros cada 100 km, según la medición de la propia computadora de abordo y con el aire acondicionado siempre encendido. En estas condiciones, la autonomía llega a casi 500 kilómetros. La conducción es placentera gracias a la dirección con asistencia electrohidráulica, que se endurece según la velocidad y resulta una seda a la hora de estacionar. El control crucero de velocidad también contribuye a un manejo descansado.
El espacio interior del Mégane II es generoso en las plazas delanteras y más que digno en las traseras. El quinto pasajero, que cuenta con cinturón inercial de tres puntos y apoyacabeza, no viajará tan cómodo como los de las plazas traseras laterales, pero mejor que en otros modelos del segmento. El baúl ofrece un volumen de carga destacable, de 520 litros, que lo ubica entre los más grandes frente a sus rivales, por encima del 307 (515 litros), el C4 (513 litros) o el Corolla (470 litros). La boca de carga es ancha y relativamente baja, y debajo del prolijo piso, que se pliega en tres partes, se ubica la rueda de auxilio, de igual medida que las “titulares” aunque montada en llanta de chapa.
Del equipamiento de confort, junto a los ya mencionados también se destacan otros elementos como la práctica tarjeta-llave, común en la familia Mégane II, que sirve como control de apertura y cierre centralizado a distancia. Sin embargo, carece de techo eléctrico, que sí ofrecen la mayoría de sus rivales, y conexión Bluetooth para telefonía celular, un dispositivo tecnológico cada día más común en el segmento.
Por último, en materia de seguridad, si bien ofrece doble airbag frontal y frenos con ABS, por ser una versión “full” de segmento C queda en deuda con los airbags laterales (presentes en varios rivales) y la ausencia, incluso más llamativa, de anclajes tipo ISOFIX para sillas de niños, un elemento disponible en autos de categoría inferior.
EQUIPAMIENTO DESTACADO
– Airbag doble frontal (conductor y pasajero)
– Alzacristales eléctricos (todos “one touch”)
– Cinturones de tres puntos (5) y apoyacabezas (5)
– Climatizador automático
– Computadora de abordo
– Control crucero de velocidad
– Dirección eléctrica con asistencia variable
– Encendido automático de luces y de limpiaparabrisas
– Espejos exteriores eléctricos
– Faros antiniebla delanteros y trasero
– Frenos con ABS y distribución electrónica
– Radio con CD (cargador de 6 discos), MP3 y comando satelital
– Sensor de estacionamiento trasero
– Tapizados, volante, palanca y freno de mano revestidos en cuero
– Tarjeta-llave de arranque y apertura de puertas
– Volante regulable en altura y profundidad
FICHA TECNICA
Carrocería: sedán, 4 puertas, 5 plazas
Motor: naftero, delantero transversal, 4 cilindros, 16 válvulas
Cilindrada: 1.998 cc
Alimentación: inyección electrónica multipunto
Potencia máxima/régimen: 138 CV/5.500 rpm
Par máximo/régimen: 19,2 Kgm/3.750 rpm
Velocidad máxima: 200 km/h
Aceleración 0 a 100 km/h: 9,8s
Tracción: delantera
Dirección: con asistencia eléctrica variable
Transmisión: manual de 6 velocidades
Frenos: a disco en las 4 ruedas; delanteros macizos, traseros ventilados
Llantas: de aleación de 16”
Neumáticos: Goodyear Eagle Excellence 205/55 R16
Dimensiones: largo, 4.498 mm; ancho, 1.777 mm; alto, 1.460 mm; entre ejes, 2.686 mm
Peso: 1.305 kg
Capacidad baúl: 520 litros
Capacidad tanque: 60 litros
Consumo promedio: 12,5 litros/100 km (autonomía: 480 km)
PRECIO Y GARANTIA
La versión probada, 2.0 In Black, se comercializa a 85.920 pesos. Hay otras diez opciones del Mégane II tricuerpo, con precios que arrancan en 63.630 pesos (1.6 nafta Confort) hasta 90.940 pesos (2.0 nafta Privilege Automático). En todos los casos, la garantía es de 1 año sin límite de kilometraje.
ALGUNOS RIVALES
Peugeot 307, Citroën C4, Ford Focus, Chevrolet Vectra, Toyota Corolla, Honda Civic
Frenos: a disco en las 4 ruedas; delanteros macizos, traseros ventilados
eso dice la nota pero se me hace q es alreves???
la mayoria d los autos traen el vendilado adelante, muy buenas sus notas
Diego