InicioNOVEDADESCómo fue la génesis del Renault Fluence

Cómo fue la génesis del Renault Fluence

Gustavo Fosco, director de Asuntos Públicos y Comunicación de la marca del rombo, dialogó con CarsMagazine sobre el origen del nuevo sedán. Ingenieros argentinos participaron en la concepción del producto en Francia. El “brenchmark” fue el Toyota Corolla.


“El Fluence tiene un contenido tecnológico que lo diferencia de sus rivales”, sostiene Fosco.

Por Martín Egozcue (especial desde Bariloche)
martin.egozcue@cars-magazine.com.ar

El Renault Fluence ha sido el último lanzamiento global de la marca francesa. Se trata de un sedán mediano (segmento C, que algunos también denominan “compactos”) que acaba de lanzarse en la Argentina, donde se lo produce para el mercado local y regional. Pero el Fluence, concebido originalmente en Francia, también se vende en otros mercados alrededor del mundo, como muestra de la internalización de la marca francesa. Gustavo Fosco, director de Asuntos Públicos y Comunicación de Renault Argentina, y quien supo trabajar intensamente en distintas áreas de diseño del rombo, dialogó con CarsMagazine sobre la génesis del Fluence. Un vehículo en cuya concepción tuvieron participación ingenieros argentinos enviados a Francia desde la planta de Santa Isabel en Córdoba. Aquí, entonces, la historia del Renault Fluence…

– ¿Cuál es la génesis de este nuevo producto?
– La historia del Fluence es muy interesante porque acompaña lo que es la internacionalización de Renault. En función de este fenómeno, nos dimos cuenta que necesitábamos un sedán mediano de diseño propio; es decir, no como antes, cuando era un derivado del hatchback. Por eso se trabajó enfáticamente sobre el Fluence, que pertenece a la gran gama Mégane, ya que comparte motorizaciones, trenes de suspensión e interiores, pero con un diseño específico en sí mismo. Además, el auto tiene una mayor distancia entre ejes y así también se independiza del Mégane. En resumen, ya no hablamos de un Mégane tricuerpo, hablamos de un Fluence. Este nuevo modelo estará en todos los mercados en los que los clientes están demandando este tipo de autos. En América Latina, por ejemplo, el segmento de sedanes medianos está creciendo. El poder adquisitivo de la gente va mejorando en general en la región y la competencia está lanzando muchos modelos allí. Entonces, Renault necesitaba tener un producto del máximo nivel para competir en ese segmento. Diría que el Fluence es un paquete completo de diseño, tecnología, tamaño, seguridad y motorización, además de ser un producto fabricado en la Argentina y con precios que, creemos, son muy competitivos.


El diseño del Fluence es independiente de la gama Mégane, de modo que no deriva del hatchback.

– ¿Por qué se decidió fabricar el Fluence en la Argentina y qué adaptaciones debieron realizarse en la planta de Santa Isabel?
– La planta de Santa Isabel siempre está en competencia con las otras fábricas de la región. Donde la casa matriz entiende que es más competitivo producir, destina el nuevo proyecto. Para esto se realizó una inversión de 500 millones de pesos y se rehizo completamente la línea de montaje de la fábrica por la nueva monoflujo; es decir, una línea adaptada a la fabricación de varios modelos y que en el futuro podrá recibir otros más sin grandes inversiones (N de la R: los vehículos que ahora se fabrican en Córdoba son Fluence, Symbol, Kangoo y Clio). En aquella compulsa de la región, Santa Isabel demostró ser la que tenía mejor ingeniería para adaptar el nuevo producto, la más competitiva y la de mejor nivel de calidad. El Fluence es un producto de alta calidad percibida y por ello requiere de alta precisión de fabricación.

– ¿Cuándo comenzó el proyecto Fluence y qué participación tuvo Renault Argentina?
– El Fluence que hoy se fabrica en Córdoba es exactamente igual al que se produce en Turquía. El auto se concibió en Francia, junto a la gama Mégane. Pero hace más de dos años mandamos 23 ingenieros argentinos a trabajar a Francia, para que participaran en la concepción del vehículo. Así se integraron en la genética del Fluence las necesidades propias de nuestro mercado, tanto de fabricación como de prestación-cliente. El Fluence es un poco un resumen de las diferentes necesidades de los distintos mercados donde se va a producir. En él se trató de incorporar lo mejor que pide cada cliente. Así, tomando el Mégane 2 como base, se mejoraron en el Fluence la asistencia a la dirección, la tenida dinámica, la insonorización y el consumo, los puntos que fueron más criticados del Mégane 2.


En la génesis del Fluence se consideraron necesidades de distintos mercados, Argentina incluida.

– Aprovechando sus conocimientos como diseñador, ¿qué sensación le transmite el Fluence?
– Lo primero que me sorprende es la impresión de calidad que emana del vehículo, la calidad de superficies, los reflejos. Me genera dos sensaciones: calidad y robustez. Todas las curvas son generosas. Y como tercer punto, destaco la fluidez del vehículo, cómo se suceden todas las líneas. Creo que el nombre le queda muy bien porque refleja lo que es el auto, todas las líneas tienen fluidez, continuidad. No hay quiebres abruptos; la línea de cintura empieza en el faro delantero, recorre el lateral y da toda la vuelta por atrás. Es un diseño en sí mismo. Si bien se tomó el parabrisas del Mégane, el resto está hecho específicamente para el sedán.

– El segmento de sedanes medianos está en pleno auge. De los nuevos y viejos rivales, ¿a cuál le apunta específicamente el Fluence?
– Nuestro “benchmark” (N de la R: parámetro en la competencia) fue el Toyota Corolla. Queríamos hacer un auto fundamentalmente de calidad y el Corolla demostró, no sólo en la Argentina sino también en Brasil, ser uno de los líderes del segmento en calidad y confiabilidad. El Fluence apunta a tener muy buena calidad, pero lo que le agregamos es un poco de estilo. Nuestro auto tiene más elegancia y un toque de distinción que, para mí, les falta a nuestros competidores…

NOTAS RELACIONADAS

5 COMENTARIOS

  1. Se nota en al auto, que usaron como modelo al Corolla, es decir un auto que no sobresaliera en nada y con pocos puntos debiles. Coherente con la politica de la empresa, de hacer productos sin personalidad, pero como punto fuerte la relación precio-producto.

  2. Ni se me cruzo la idea de que puede parecerse a un Corolla, convengamos que hay una realidad, la tendencias son las tendencias, tiene parecidos y vivimos en el mundo de la moda, pero tampoco para cuestionarlo y compararlo con un TOYOTA COROLLA,. Son dos deseños totalmente nada que ver.-

  3. soy de formosa aaaaaaaa el extremo de direccion se corto k seguridad k tiene espero que se acerk alguien de renault ya que todos se lavan las manos gracias si alguien m escucha y si m pasaba en la ruta no iva a poder escribirle saludos A LOS INGENIEROS

Los comentarios están cerrados.