El C4 híbrido utiliza una batería de litio de 125 kW que se suma al habitual impulsor de combustión. Cuando el piloto lo desea, el motor eléctrico, que recupera energía en fase de frenado (como el KERS de la F.1), puede entregar torque adicional en situaciones de carrera. Luego, cuando el coche se dirige al siguiente tramo cronometrado, se puede transitar únicamente en modo eléctrico. Con esta tecnología, Citroën busca generar un futuro menos contaminante y más amigable con el medio ambiente para el Mundial de Rally.
“En modo eléctrico se puede circular sin hacer el más mínimo ruido, lo que es inusual para un auto de carrera. Es mejor para el medio ambiente y también más confortable para la tripulación. Las secciones de enlace son más placenteras”, comentó Sordo, quien probó el vehículo en Faro, Portugal. “En los tramos de carrera, a plena velocidad, diría que el comportamiento general del auto es algo distinto al del convencional, con más peso en la parte trasera”, explicó el español, antes de agregar que a la hora de presionar el botón del “boost” eléctrico “el efecto es impresionante”.