La marca bávara está estudiando la firme posibilidad de producir un rival directo para la nueva Mercedes-Benz Clase X. ¿Se asociará con Toyota para hacerlo?
BMW estaría analizando la producción de una pickup, un producto inédito para su historia. La marca alemana podría sumarse a competir en uno de los segmentos que mayor crecimiento registra a nivel mundial en la última década.
“Nunca digas, nunca jamás…”, deslizó el Director General de BMW en Australia, Marc Werner, en diálogo con la prensa especializada internacional al ser consultado sobre la posibilidad de fabricar una pickup. A partir de esto, el diseñador Taekang Lee se animó a dibujar cómo sería su diseño definitivo, en base a la estética exhibida en los distintos modelos de la gama X.
De concretarse su producción, este producto sería un rival directo para la Mercedes-Benz Clase X (ver más aquí), que comenzará a fabricarse en 2019 bajo la plataforma de la Nissan NP300 Frontier en Santa Isabel. A partir de esa arquitectura también surgirá la Renault Alaskan (ver más aquí), que completará la triada de pickups cordobesas.
La gran pregunta es: ¿se lanzará en soledad BMW para fabricar esta pickup o se asociará con alguna automotriz con más experiencia en este segmento para aprovechar su conocimiento? No está confirmado, pero medios de Europa sostienen que la firma alemana podría utilizar la plataforma de la Toyota Hilux. Con la marca japonesa, BMW está desarrollando los nuevos Z4 y Supra (nueva generación), además de emplear comunes motores diésel de baja cilindrada.
Lo mismo podría hacer Audi, otra Premium alemana, que estaría siguiendo de cerca los resultados de la Clase X para convencerse de entrar en este segmento. En este caso, al formar parte del Grupo Volkswagen, la firma de los cuatro anillos podría aprovechar la plataforma de la Amarok.